Hay una gran variedad de alergenos que pueden afectar a nuestras mascotas, de manera general los factores que más afectan a nuestras mascotas son los ambientales, en segundo lugar los alimentarios y por último y no poco frecuente la sensibilidad a la picadura de las pulgas.
Entre los factores ambientales que más afectan a nuestras mascotas alérgicas están los ácaros del polvo Dermatophagoides farinae, Dermatophagoides pteronyssinus sus excretas contienen una proteína que ocasiona reacción alérgica en personas y mascotas muy sensibles.
Si tu mascota desarrolla erupciones, irritación, prurito (picazón) moderado a intenso, es muy probable que tenga sensibilidad a los ácaros.
NO EXISTE CURACIÓN PERO SI CONTROL
Lleva a tu mascota a un veterinario dermatólogo, mientras tanto aspira alfombras, cortinas y colchones regularmente, preferiblemente con una aspiradora con filtro HEPA. Saca a tomar el sol las alfombras y cojines, también la cama o colchón donde duerme tu mascota. Puedes aplicar spray acaricida a base de benzoato de bencilo de venta en farmacias (mucho cuidado, es de olor muy fuerte) cuando lo apliques en los muebles o alfombras nadie (incluido tu mascota) debe estar en el área donde se aplique el producto.
Baña regularmente a tu mascota con un champú específico para perros y gatos que sea suave y de uso frecuente, ayudarás a hidratar su piel y aliviarás la irritación.
Otra cosa que puede ayudar es el uso de purificadores de ambiente.
Considera que es una condición que sólo tú puedes controlar siendo perseverante y constante en lo que requiera tu mascota y nunca dejes de llevarla a control con el veterinario, él te indicará los pasos a seguir ya que de seguro tendrás que variar los protocolos de tratamiento conforme pasa el tiempo, probablemente lo que hacías en un comienzo no resulte después de algún tiempo y tengas que variar el producto o la frecuencia de uso.