Las dermatitis o enfermedades de la piel son trastornos con causas muy diversas, de los pacientes que van a consulta veterinaria un porcentaje considerable tienen algún problema dermatológico.
Para llegar a un diagnóstico acertado es necesario realizar un estudio clínico minucioso y en muchos casos, exámenes de laboratorio para llegar a la causa de la enfermedad que aqueja al paciente.
Ya que las causas son tan diversas voy a tratar de señalar y describir las más comunes.
Dermatitis bacteriana
Dermatitis micótica
Dermatitis endocrina
Dermatitis inmunológicas
Dermatitis nutricionales
Dermatitis Neoplásicas
Seborrea
DERMATITIS BACTERIANA O PIODERMA.-
Como su nombre lo indica es causada por bacterias siendo los staphilococcus los más patógenos.
Esta dermatitis puede ser desde superficial hasta profunda es decir que destruye las capas internas del tejido cutáneo.
Para su diagnóstico se debe recurrir e un examen de piel y cultivo, ya que se puede confundir con otras enfermedades de la piel.
Una vez identificado el causante de la infección se inicia con el tratamiento específico que va desde rasurado del área afectada, aplicación de soluciones o cremas antisépticas y antibiótico sistémico, el tratamiento puede durar de 1 a 2 semanas
Formas de prevenir o disminuir las probabilidades de que desarrolle esta enfermedad son: suministrar una dieta balanceada de alta calidad, mantener en un ambiente seco y limpio, secar bien después de cada baño, cepillar el pelaje con regularidad.
DERMATITIS MICÓTICA.-
Es causada por hongos de diferentes especies de los géneros microsporum, tricophyton, entre otros.
Es muy contagioso por contacto directo y por el contacto con materiales contaminados. Las lesiones se presentan de diferentes formas, desde zonas alopécicas circulares, placas eritematosas, foliculitis, escamas y costras. Pueden ser localizadas o diseminadas en todo el cuerpo, incluso en las uñas.
Para el diagnóstico se requiere de un examen físico completo y pruebas de laboratorio para identificar al agente causante.
El tratamiento incluye medicamentos antimicóticos tópicos y orales; puede durar desde semanas hasta meses por lo que el propietario debe estar conciente de lo prolongado del tratamiento como de su costo.
La prevención de una dermatomicosis es una tarea que requiere constancia y cooperación del propietario. Eliminar los utensilios de comida y la cama para donde duerme la mascota, utilizar desinfectantes para limpiar pisos y paredes de ser posible (cloro de uso doméstico o agua caliente; si dispone de una máquina de limpieza que emita vapor también puede ser utilizada con buenos resultados). Las superficies o muebles de madera pueden repintarse para un mayor control. Las esporas de los hongos pueden permanecer viables por un año o más, por lo que el tratamiento del medio debe ser lo más prolongado posible.
DERMATITIS ENDOCRINA.-
Muchas hormonas afectan directa o indirectamente a la piel y sus anexos provocando alopecía muchas veces bilateral, con prurito variable.
Los trastornos endocrinos más conocidos son: hipotiroidismo, hiperadrenocorticismo y otros más.
Las causas son el mal funcionamiento de las glándulas hormonales que pueden ser afectadas por neoplasias u otras causas.
Por lo general el tratamiento es prolongado e incluso de por vida. Controles sanguíneos y niveles hormonales periódicos.
DERMATITIS NUTRICIONAL.-
Por lo general se debe a una dieta no balanceada con ingredientes de mala calidad ya que no cubre las necesidades mínimas esenciales del animal provocando una deficiencia de proteínas, vitaminas, minerales, ácidos grasos esenciales. (DIETAS CASERAS)
Toda esta falta de nutrientes en la dieta se refleja en una piel y pelaje dañado con resequedad, falta de brillo, quebradizo que se cae con facilidad dejando zonas alopécicas; se pueden observar lesiones costrosas, pérdida de pigmentación capilar, pelo seboso o seborreico, en algunos casos caspa que no se elimina con cualquier shampoo anticaspa, y otros signos clínicos más.
Para solucionar el problema es recomendable dotar de una dieta balanceada comercial de alta calidad, suplementos nutricionales adicionales al alimento, utilización de champú adecuado al tipo de piel y pelo del animal.